Se necesita instruir a 60 mil millones
de habitantes, y los Maestros Ascendidos necesitan colaboradores en los campos
de la política, la enseñanza, la filosofía, las finanzas, el arte, la ciencia,
la salud, la informática, el turismo, las religiones, el deporte, la
diplomacia; incluso en áreas mal vistas por la sociedad, porque hasta un
delincuente o una prostituta requiere del auxilio de la Jerarquía Espiritual.
Los mejores candidatos son: jóvenes que no se han comprometido en las redes del
mundo; seres de cualquier edad a los que no les atrae la vida mundana; y
personas de cierta edad a las que ya no les interesa el mundo externo y buscan
algo diferente que hacer.
"La Jerarquía Espiritual se
asegura de no desenvolver esta responsabilidad en "personas dudosas",
porque no se puede cometer ningún error -existe la consigna de "NO
FALLAR"-, y Ellos son responsables de llevar esta empresa de alcance mundial;
por eso, no toman como colaborador a alguien que no dé con la talla, porque
Ellos también, en su nivel, están siendo probados, y no pueden equivocarse en
escoger a sus colaboradores. El futuro y el éxito del Estudiante dependerán de
cómo afronte las pruebas, ya
que además de pruebas, son entrenamiento. El que no ha sido sabio, fuerte,
valiente y lo suficientemente entrenado, debido a una falsa compasión de su
facilitador que le ha omitido determinadas vivencias fuertes, será un individuo
débil y vulnerable, que podrá quebrarse en cualquier revés del camino. Por lo
tanto, es un privilegio ser entrenado fuertemente, ya que es garantía de
conquista en el logro de lo emprendido.
Este desarrollo no es para temerosos.
Si esto hace que se eche para atrás el que no se considera apto, que no lo
haga, que no va a tener a nadie atrás dándole ánimos para seguir; hay muchos
capaces de realizarlo sin necesidad de ayuda.
Tomado del libro ASCENCIÓN de Rubén Cedeño.
