A menudo oímos la expresión “saludando
el Cristo en el”, o “viendo el Cristo en el”, y bien podemos preguntarnos qué
significa realmente esta frase.
Es simplemente la aplicación práctica de la regla de Jesucristo "No juzguéis según las apariencias, sino juzgad con justo juicio.." (Juan 7:34)
Cada uno de nosotros tiene un Ser
Divino que es espiritual y perfecto, pero que nunca es visto en este plano. Que
es el hombre verdadero, el hombre de Dios, lo que algunas veces llamamos “el
Cristo Interno”.
Siempre que tu mores sobre o realices la Presencia de Cristo en tu interior, o en el interior de cualquier otro, las apariencias exteriores comenzaran inmediatamente a mejorar.
Si alguien te desagrada, silenciosamente saluda al Cristo en el. Si alguna persona dice algo en contra del carácter de Fulano o Sutano, saluda al Cristo en el, rehúsa discutir la cuestión y por supuesto no lo repitas.
Lo más a menudo que tu saludes el
Cristo en otros, será lo más pronto que lo encuentres en tu ser.
Tomado del libro 'Un año con Emmet
Fox'.